Vol. 20 Núm. 221 (1943)
LAS jiras que se realizan al exterior enseñan a quienes las hacen muchas lecciones de importancia para el conocimiento de los países. Queremos decir que en la América hispana apenas si los países se conocen entre sí. Están lejos los unos de los otros y proceden como si no fueran pueblos de un mismo origen y con iguales tradiciones. Pero este desconocimiento es mayor, y desde luego más Justificado, en lo que respecta a Estados Unidos. En Estados Unidos hay un gran deseo de conocer y valorizar a estos países sudamericanos. Pero los instrumentos de la propaganda son deficientes, incompletos y apenas sirven para el objeto. La distancia es factor preponderante para un conocimiento más íntimo y la dificultad del idioma levanta obstáculos que son muy difíciles de salvar. Los norteamericanos no se han formado una idea clara de nuestros problemas debido especialmente a esta falta de propaganda sabiamente distribuída por los sudamericanos en su propio país.