Editorial

Abstract

En este número se aborda un tema que es crucial en la educación –y que ya ha sido tratado en números anteriores– como es la comprensión lectora. En el número 53 se abordó la comprensión lectora desde un punto de vista textual en alumnos de enseñanza media de España. En esta ocasión, Alejandra Ramírez Quilape, de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, y Luis Martínez Rodríguez, de la Universidad de Talca, realizan un estudio en población chilena
con alumnos de enseñanza básica. La principal contribución de este estudio es la inclusión de una variable lingüística nueva: la conciencia morfológica,  entendida como la capacidad de comprender el significado de los prefijos y sufijos que forman las palabras compuestas. Los resultados de este estudio muestran un incremento en el desempeño de la conciencia morfológica en quinto año básico; sin embargo, a nivel de sexto año se presenta un estancamiento, fundamentalmente en la comprensión de prefijos. La contribución de este artículo es relevante en varios sentidos: en primer lugar porque establece una
correlación significativa entre conciencia morfológica y comprensión lectora, en segundo lugar porque aborda un nivel lingüístico poco explorado hasta ahora como es el nivel morfológico, responsable de la formación de palabras nuevas y un indicador temprano del significado de las palabras y, en tercer lugar, por su implicancia en el aprendizaje. De acuerdo a las diferentes mediciones que se han hecho sobre comprensión lectora (SIMCE, 2012; PISA, 2009), los estudiantes chilenos alcanzan un bajo porcentaje de comprensión lectora, cercano al 40% a nivel nacional; de este modo, conocer las causas del problema parece ser el camino adecuado para elaborar soluciones al mismo, a través de una didáctica de comprensión lectora acorde con las dificultades que presentan nuestros estudiantes.